Los vecinos del barrio también saltaron sus rejas, se movilizaron y pidieron que la cárcel se convirtiera en un lugar destinado a servicios públicos y sociales, un símbolo de paz para no olvidar todo lo que allí sucedió, pero el terreno de 200.000 metros cuadrados en el que durante 55 años estuvo abierta la mítica cárcel de Carabanchel sigue siendo un solar frente al parque Eugenia.